La fisioterapia deportiva va dirigida a toda aquella persona que practica deporte de forma regular, ya sea a nivel deporte-salud, deporte de base, amateur o élite, así como mostrar unas correctas directrices a aquellos pacientes que practican actividad física y quieren hacerlo de forma segura.
La función del fisioterapeuta deportivo, estará dirigida a la recuperación y readaptación deportiva del paciente lesionado.
Objetivos de la fisioterapia deportiva
- Acortar lo máximo posible los tiempos de recuperación. El tejido necesita unos plazos determinados para regenerarse. Dependiendo del tipo de patología, la fisioterapia ayuda a acelerar estos tiempos.
- Adaptar el cuerpo al entrenamiento. Empezar a entrenar cualquier tipo de deporte implica promover unas condiciones óptimas del sistema músculo-esquelético para obtener el máximo de beneficios.
- Evitar los factores de riesgo.
- Reincorporación al entrenamiento. Saber decidir si el paciente puede volver a hacer deporte o aún no, reduciendo posibles recaídas en el futuro.
- Prevención de lesiones. Esta es una de las tareas más importantes del fisioterapeuta deportivo y una de las menos conocidas, cuyo objetivo es disminuir el riesgo de lesión, mejorar las condiciones musculares del deportista, evitando sobrecargas y mejorando el rendimiento durante el ejercicio.
INDICACIONES
- Masaje de descarga
- Traumatismos, contusiones
- Lesiones capsulo-ligamentosas (esguinces, distensiones de ligamentos, luxaciones articulares)…etc
- Tendinitis/ tendinosis (manguito rotador, rotuliano, Aquiles…)
- Meniscopatias, condromalacia rotuliana…
- Esguinces tobillo, ligamentos laterales de la rodilla, cruzados, esguince de muñeca…
- Lesiones musculares, rotura de fibras, contracturas, puntos gatillo, etc.
- Osteopatía de pubis.